La jardinería en los países nórdicos presenta desafíos y recompensas únicas. Largos, inviernos fríos seguidos de veranos cortos pero vibrantes requieren estrategias específicas para un jardín próspero. Exploremos algunos consejos para ayudarte a crear un hermoso oasis al aire libre en estos climas del norte.
Abraza las estaciones
El clima nórdico ofrece estaciones distintas, cada una con sus propias oportunidades para la jardinería. Aprovecha al máximo la corta temporada de crecimiento seleccionando cuidadosamente plantas que prosperen en estas condiciones. Considera bulbos de floración temprana como los crocus y campanillas para un estallido de color tan pronto como se derrita la nieve. Las anuales y perennes amantes del verano pueden prosperar con el cuidado adecuado.
Aprovecha el poder del sol
Los veranos nórdicos, aunque cortos, ofrecen una luz diurna intensa. Aprovecha esto eligiendo plantas que aman el sol. Sin embargo, ten cuidado de proporcionar sombra a las flores delicadas durante las horas más calurosas del día.
Domina el arte de la protección
El invierno puede ser duro, por lo que proteger tu jardín es esencial. Acolcha las plantas perennes para aislar sus raíces de las temperaturas bajo cero. Considera usar cubiertas contra heladas o cuadros fríos para plantas delicadas. Para la jardinería en macetas, lleva las plantas delicadas al interior durante los meses más fríos.
Adopta variedades locales
Los países nórdicos han desarrollado su propia flora única. Incorpora plantas nativas en tu jardín, ya que están bien adaptadas al clima local. Estas plantas suelen requerir menos mantenimiento y aportan un sentido de lugar.
Crea un espacio exterior acogedor
Incluso durante los meses más fríos, tu jardín puede ser un refugio acogedor. Invierte en muebles de exterior cómodos y accesorios acogedores como mantas y faroles. Considera añadir un pequeño invernadero o conservatorio para extender tu temporada de jardinería.
Enfócate en plantas de bajo mantenimiento
Dadas las dificultades del clima nórdico, optar por plantas de bajo mantenimiento es sensato. Las plantas perennes que vuelven año tras año pueden ahorrar tiempo y esfuerzo. Considera los cubresuelos para suprimir las malas hierbas y retener la humedad.
Seleccionar las plantas adecuadas es crucial para un jardín nórdico próspero. Considera estas opciones:
Perenne resistentes
- Cubresuelos: Opta por cubresuelos de bajo mantenimiento como el phlox rastrero, muguete, o vinca perenne para suprimir malezas y añadir color.
- Gramíneas ornamentales: Agrega textura y movimiento con gramíneas como la hierba de pluma (Calamagrostis), Miscanthus, o Deschampsia caespitosa.
- Perennes clásicas: Elige variedades resistentes de hostas, hemerocallis, peonías, y delphiniums para floraciones confiables.
- Plantas nativas: Incorpora flores silvestres y arbustos locales para un aspecto natural y para apoyar la vida silvestre.
Bulbos y cormos
- Florecientes de primavera: Planta crocus, tulipanes, narcisos, y jacintos para color y alegría temprana.
- Bulbos de verano: Considera lirios, dalias, y gladiolos para un tiempo de floración prolongado.
Arbustos y árboles
- Perenne: Proporciona estructura durante todo el año con coníferas como enebro, pino, o abeto.
- Arbustos caducifolios: Elige variedades florales como rododendros, hortensias, o lilas para interés estacional.
- Árboles frutales: Considera árboles enanos de manzana o pera para cosechas deliciosas, si tu clima lo permite.
Anuales y verduras
- Anuales de rápido crecimiento: Opta por anuales resistentes como capuchinas, girasoles, y zinnias para un color vibrante en verano.
- Huerto de verduras: Cultiva verduras resistentes al frío como lechuga, espinaca y rábanos al inicio de la temporada.