Cómo cultivar Semillas de Apio Tango
Inicio en interiores: Las semillas de Apio Tango pueden iniciarse en interiores aproximadamente 8 a 10 semanas antes de la última fecha de helada en su área. Use bandejas de semillas o macetas pequeñas llenas con una mezcla para iniciar semillas que drene bien.
Siembra de Semillas: Plante las semillas de Apio Tango a aproximadamente 0.5 cm de profundidad en el suelo. Presione suavemente las semillas en la superficie del suelo y riegue ligeramente. Mantenga el suelo constantemente húmedo pero no encharcado.
Germinación: Las semillas de apio pueden tardar de 7 a 14 días en germinar. Mantenga las bandejas o macetas de semillas en un lugar cálido con temperaturas alrededor de 21°C. Usar una alfombrilla térmica para plántulas puede ayudar a acelerar la germinación.
Trasplante: Una vez que las plántulas de apio hayan desarrollado sus primeras hojas verdaderas y sean lo suficientemente grandes para manipular, trasplántelas a macetas individuales o bandejas de celdas. Mantenga las plántulas bien regadas e introdúzcalas gradualmente a las condiciones exteriores si se plantarán afuera.
Plantación al aire libre: Después de que haya pasado la última helada y el suelo se haya calentado, trasplante las plántulas de Apio Tango a un lugar soleado en el jardín. El apio prefiere un suelo rico y húmedo con abundante materia orgánica. Separe las plantas aproximadamente 20 a 25 centímetros entre sí en filas separadas 45 a 60 centímetros.
Riego: Mantenga el suelo constantemente húmedo durante toda la temporada de crecimiento. El apio requiere riego regular para evitar que el suelo se seque, pero tenga cuidado de no regar en exceso, ya que el apio no tolera condiciones de encharcamiento.
Apisonado: A medida que las plantas de apio crecen, amontone tierra alrededor de la base de las plantas para blanquear los tallos y protegerlos de la luz solar. Esto ayuda a mejorar el sabor y la ternura de los tallos de apio.
Cosecha: Las plantas de Apio Tango tardan aproximadamente 115 días en madurar. Se pueden cosechar cuando los tallos estén firmes y midan entre 30 y 45 centímetros. Corte los tallos exteriores cerca de la base de la planta, dejando que los tallos interiores sigan creciendo. Para un mejor sabor y almacenamiento más prolongado, riegue las plantas el día antes de la cosecha.